Suspenden construcción de torre empresarial por perturbar a vecinos
La decisión es de carácter preventivo mientras se adoptan los correctivos.
La Inspectora 1ª de Policía Urbana de Reacción Inmediata, Barlis Roa Escobar, ordenó la suspensión preventiva de las obras de construcción de la Torre Empresarial Atlántica mientras se adoptan los correctivos pertinentes a los problemas que causan perturbación en los inmuebles vecinos, en especial el edificio Vizcaya ubicado en la carrera 55 No. 80-205.
Roa Escobar decidió así una querella interpuesta por la representante legal de la edificación, Olga Lucía Navarro de Cuello, a través de su apoderado José Gilberto Cabal Pérez.
Los querellantes argumentaron que desde hace año y medio las obras, a cargo de Constructora Concreto, les causan perturbación a los vecinos, con la emisión de polvillo, ruidos, daños en paredes, pisos, aires acondicionado y hasta en el tanque subterráneo de almacenamiento de agua.
Por ello solicitaron se proceda con las reparaciones e indemnizaciones de rigor y como medida preventiva se suspenda la ejecución de los trabajos mientras se llega a un acuerdo sobre los hechos denunciados.
Los hechos objeto de la querella fueron ratificados por Inés Elvira Navarro de Cuello y María Victoria Navarro de Arana, en calidad de afectadas y quienes residen en la misma edificación.
En la audiencia celebrada el viernes, el director de la obra, Jorge Leonardo Martínez Luque, admitió que, por el efecto constructivo, se han registrado daños que en ningún momento han sido negados ni desconocidos por la constructora, por lo cual la empresa ha procedido con la evaluación y la cuantificación de las obras a reparar, incluyendo el cronograma de actividades.
Martínez Luque dijo en la audiencia que una situación similar fue solucionada con otros vecinos (Villa Regia y familia Correa) y sostuvo que cuenta con permiso del Damab para trabajar los sábados de 7 de la mañana a 4 de la tarde, mientras que domingos y festivos no se labora.
Según el director de la obra, la demora a un acuerdo con los vecinos del edificio Vizcaya radica en el hecho que no se han podido trasladar los vehículos al parqueadero que la constructora consiguió para ellos.
Esto en razón de que los propietarios solicitaron que les sean asignados un vehículo con conductor a cada una de las familias, lo cual la constructora consideró que se trata de algo “desproporcionado”. A cambio de ello la constructora propuso como parqueadero el sótano de la obra, con ingreso directo y vigilancia permanente.
Al final, la Inspectora Barlis Roa Escobar ordenó la suspensión preventiva de los trabajos y ordenó que se tomen correctivos inmediatos como la adecuación de andamios, parasoles y los elementos que sean necesarios para no perturbar a los vecinos.
En el mismo lapso, 5 días, constructores y vecinos también deben llegar a un acuerdo motivo de la querella.